Mensaje a la Juventud
¡Sigamos adelante, no dejemos de lado el consejo de un hombre maduro, acudamos a sus consejos! Pero no por eso dejemos de empujar la carreta para llevar adelante los proyectos que tanto necesitamos todos.
Uno pasa por esta vida y lo que menos quisiera es pasar sin haber hecho nada, sin haber desempeñado alguna función, sin haber tenido nada de interés en el mundo por el que está pasando. Los jóvenes somos los que más interés debemos tener en estos temas, los viejos pasando quisieran dejar algo, cosas buenas pero a veces no se puede, porque ya van pasando. Pero los jóvenes son los que estamos, los que podemos aportar las mayores y mejores ideas. José Joaquín Trejos una vez me dijo a mí que “hay que poner a los jóvenes a trabajar a la par de los viejos porque el joven tiene energía para empujar, el joven nos hace movernos, nos pone a caminar, nos llena de entusiasmo, nos lleva adelante; cuando un viejo se queda rezagado lo empujan, lo entusiasman, lo animan para que lleve adelante un proyecto, porque está lleno de energía. Pero cuando el joven corre más de la cuenta, cuando se puede tropezar con la velocidad que lleva, es cuando el viejo le da consejos y le hace ver con su experiencia las cosas que pueden sucederle a ese proyecto si se aceleran demasiado rápido y cómo deben dar los pasos certeros y firmes para que las cosas salgan bien”. Por todo eso hay que combinar a los jóvenes con los viejos, para que el viejo señale el camino a los jóvenes y los jóvenes jalemos rápido la carreta y se puedan llevar adelante los proyectos. Yo creo que eso es absolutamente una realidad.
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